sábado, 17 de enero de 2009

El rostro de la ignominia: Francisco Marhuenda


El exabrupto humano no conoce límites y su calificativo de humano sólo se aplica en casos en que la incultura o el acaloramiento de una discusión desemboca en su creación. Cuando proviene de un ser irracional con estudios superiores y posición social con la tranquilidad de un sillón de debate en amigable tertulia mañanera, solamente se puede calificar como odio visceral, traición del subconsciente consciente.

En la mañana de ayer, mientras esperaba a mantener una reunión con mi amigo Feliciano Pérez, me entretenía viendo el debate que mantenían sobre la guerra de Gaza los comentaristas políticos del programa Espejo Público de Antena 3, la presentadora/moderadora del programa Susanna Griso indica los muertos en Palestina ante los ataques de Israel, frente a los de Israel ante ataques palestinos (1.100 contra tres), a lo que Francisco Marhuenda matiza que cuántos de esos muertos son inocentes, “300 niños muertos estarás conmigo en que son inocente”, espeta la Griso, a lo que este insigne ciudadano de mente porcuna manifiesta “¿y cuántos de esos niños mueren normalmente por causas naturales?”, no se puede ser más zafio y seguir impasible el debate, pequeñas exclamaciones de horror y a otra cosa, en la conciencia de los de alrededor quedará la oportunidad perdida de mandar a este caballero de rastreros pensamientos al lugar de donde jamás debió salir: el cubo de la basura. Seguro que este tío nauseabundo posee argumentos suficientes para justificar los ataques israelíes a Gaza contra los terroristas de Hamas y admitir lo desmedido de estos ataques con víctimas civiles, pero entonces se manifestaría su pertenencia a la especie Homo Sapiens Sapiens.

Pero quién es este espécimen de Trol “mejorado”. Actualmente es Director del diario La Razón y fue jefe de Gabinete del Ministerio de Administraciones Públicas cuando Mariano Rajoy ostentó dicha cartera. ¿Por qué será que ya no me sorprende tanto su comentario? Además, este humano, recolector de frutas en las selvas africanas con el lomo plateado, es uno de los más firmes opinantes antiabortistas, crímenes de víctimas inocentes, el doble rasero siempre en la hipócrita “derechona” española.

Finalmente, Sr. D. Francisco Marhuenda, quisiera hacerle ver que lo más normal es que Ud. muera algún día por causas naturales y por su bien y por el de la mayoría de mis congéneres no haya ningún iluminado que se de cuenta de ello y, siguiendo su teoría, se le ocurra aquello de “total de todas formas moriría igualmente”. Cien años de perdón al discípulo.

2 Tu opinión también cuenta:

Anónimo dijo...

No hay duda de que sus palabras fueron de encefalograma plano pero no podemos obviar otras muchas cosas que se estan obviando por los intereses que sean.

Esos niños que han muerto son merecedores de todo el clamor para que pare esto de una vez,pero igual de merecedores eran otros muchos niños que fueron usados como bombas humanas por sus compatriotas para matar a civiles israelitas.Tambien eran merecedores de ese clamor todos aquellos que han muerto por no tener lo mas elemental para poder subsistir o por no tener medicamentos porque sus dirigentes se gastan lo que no tienen en conseguir armas para continuar esta guerra absurda que no conduce a nada.

Tambien son dignos de ese clamor todos aquellos niños que fueron vendidos por sus progenitores para paliar sus deudas y que fueron adoctrinados por esos que comparten el mismo encefalograma plano que el susodicho,para ser utilizados como armas humanas.

Lastima que solo nos acordemos de alzar nuestro clamor cuando determinados intereses creados disponen que asi sea.

Yo tambien soy antiabortista y no por ello pertenezco a ese grupo que comentas pero tampoco me identifico con la parte contraria porque Tere tambien luce un encefalograma plano de escandalo.Todo lo quiere arreglar con su repetida a la par que celebre frase "alianza de civilizaciones"......todo el que no vale para nada se mete a politico,asi nos va a todos.

De vergüenza.

http://reflexioneselena.blospot.com dijo...

A FRANCISCO MARHUENDA

¿ES ESTO HIPOCRESÍA?

Señor Director de La Razón:

Me ha sorprendido cómo su coherencia moral destruye su coherencia sentimental.
El amor que puede sentir una persona con mayor fuerza e incondicionalmente, es el que un padre tiene por su hijo. Usted ha declarado, en el programa 59’’, que iría en contra de sus principios aceptar la investigación con células madre con fines terapéuticos, póngase como ejemplo curar a un hijo como única alternativa a su enfermedad. ¿No cree, que si usted quiere enormemente a un hijo (como así afirmo: “es lo que más quiero en este mundo”), si está enfermo, aprovecharía esa investigación para curarlo? Es totalmente incoherente, con sus sentimientos. Permítame decirle, que eso demuestra la frialdad de su actitud puesto que antepone la coherencia de sus pensamientos a la coherencia de sus sentimientos.